Comarca de la Vera qué ver y dónde alojarse. HR La Casa de Pasarón recomendado.
La comarca de La Vera es una joya escondida en el noreste de la provincia de Cáceres.
Se extiende a lo largo de unos 65 kilómetros de longitud y 15 kilómetros de ancho. Situada entre la ladera sur de la Sierra de Gredos y el río Tiétar, su peculiar geografía genera una red de gargantas y arroyos, creando un microclima único que da lugar a paisajes deslumbrantes y una naturaleza vibrante y en continuo esplendor.
¿Sabías que La Vera es famosa por su abundancia de gargantas, y que posiblemente sea la comarca con más gargantas de toda España?
De los 19 municipios que la conforman, cinco han sido declarados Conjunto Histórico-Artístico: Pasarón de la Vera, Garganta la Olla, Cuacos de Yuste, Valverde de la Vera y Villanueva de la Vera. Estos pueblos combinan el encanto de sus casas tradicionales con la majestuosidad histórica de palacios y edificios señoriales.
Pasarón de la Vera
Iniciando nuestro recorrido en el oeste, Pasarón de la Vera es un pueblo con raíces medievales, probablemente fundado por hidalgos asturianos, de ahí su nombre "Pasarón", que significa "pájaro grande". Aquí destaca el imponente Palacio de Los Condes de Osorno, un edificio renacentista construido entre 1531 y 1544. Este palacio, residencia de los Condes de Osorno, es uno de los mejor conservados de la provincia y su fachada principal domina la tranquila Plaza del Palacio.
Cuentan que en parte fue por la amistad y la recomendación de los señores de palacio que Carlos V terminara sus ultimos días en la Vera. Sin olvidarnos de la leyenda del palacio que cuenta los amores de Magdalena, con Jeromín, Don Juan de Autria.
El pueblo también alberga la casa señorial de Don Luis, capitán de navío, quien financió la remodelación de la ermita de la Virgen de la Blanca. La casa de Don Luis, labrada en sillería con una puerta adintelada y un escudo que muestra un navío fortificado, es otra joya arquitectónica del lugar.
Garganta la Olla
Siguiendo nuestro recorrido, llegamos a Garganta la Olla, declarado conjunto histórico artístico de la comarca en 1983. La iglesia parroquial de San Lorenzo, con su torre renacentista de estilo herreriano, y el barrio de La Huerta, con sus estrechas calles y casas tradicionales, hacen de este pueblo un lugar de gran atractivo.
Garganta la Olla también es famosa por la Casa de las Muñecas, un antiguo prostíbulo del siglo XVI identificado por su color azul y las figuras femeninas esculpidas en la jamba de la puerta. Este detalle curioso añade un toque de historia pícara a la visita. Dicen que los caballeros se asomaban por la cerradura para ver las mujeres que estaban dentro.
Aquí tampoco podemos olvidar la leyenda de La Serrana, mujer despechada que se lanzo a la sierra como una bandolera y cuentan que en su cueva después de invitar a cenar a los que se perdían por la sierra les mataba.
Cuacos de Yuste
Cuacos de Yuste es otro pueblo que merece una visita. Independizado del señorío de Plasencia en 1813, Cuacos de Yuste es un ejemplo vivo del típico estilo de caserío verato. Su casco antiguo, declarado conjunto histórico artístico desde el año 1959, y la fuente de los Chorros, que mana incesantemente agua de la Sierra, son paradas obligatorias. Además, el Monasterio-Palacio de Yuste, donde el emperador Carlos V pasó sus últimos días, es el monumento más emblemático de la comarca.
Valverde de la Vera
Valverde de la Vera destaca por su entramado de calles y casas que parecen salir de un cuento. El monumento pétreo conocido como el Rollo de la Picota, con sus eslabones y cabezas esculpidas, y la Plaza de Aniceto Marinas con su fuente de seis caños, son algunos de los puntos más encantadores del pueblo. Aquí, la arquitectura tradicional con sus aleros voladizos y calles serpenteantes da una sensación de intimidad y frescura que transporta a tiempos pasados.
Villanueva de la Vera
Finalmente, llegamos a Villanueva de la Vera, donde las casas de madera con aleros sobresalientes y las calles retorcidas crean un ambiente acogedor y lleno de historia. La iglesia parroquial, con su retablo mayor de estilo churrigueresco y tallas de Santa Ana y San Antonio, es un testimonio de la rica herencia artística del lugar. La Plaza de Aniceto Marinas, porticada y con una fuente de seis caños, invita al visitante a descansar y disfrutar del entorno.
La Vera es una comarca que fascina con sus paisajes, su historia y su arquitectura. Cada pueblo ofrece una ventana a un pasado vibrante y una vida rural auténtica, perfecta para explorar y dejarse maravillar.
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